Puede ser cualquiera.
Él. Por ejemplo.
¿Por qué sentimos electricidad?
No lo recuerdo.
Escucha, este día hubo inmenso calor en mi oficina.
Me viste transpirar.
Pero, ¿lo sentiste?
No lo sé.
Parece que todo lo que dices es cierto.
Noto que hablas demasiado.
Pero pueden ser nervios
o soledad.
Ves. Todavía lo ignoras, pero, el día que me conociste
llovió por la noche;
pensabas
que las horas pasaran a prisa.
Para sentir esa electricidad otra vez.
Yo quisiera decirte que a mí ya me aman mucho.
Y sufren.
Principalmente mi madre.
No me siento orgullosa de ello.
Porque hay días de mucha luz, donde siento a Dio-s en mí
Y agradezco por todo.
Donde soy generosa.
Y me quedo en harapos
pero estoy llena.
Sobre todo, me gustaría decirte:
esencialmente soy una persona cruel.
Tú, me ves pequeña y amorosa. Pero no.
Cuando recorro mis caminos pasados
Veo el estruendo que produje
el daño que cause
y me estremezco.
Todavía después del derrumbe
juntaban energías para quererme salvar
aun, me recuerdan,
aunque me odian.
Pero también tienen la venganza.
Lo han hecho bien.
Tienen casas cerca del mar,
sí me ven, me sonríen.
Yo me quedé en un lugar muy tranquilo
Con alguien que me ama a medias,
que solo me puede amar a medias
porque no me conoce muy bien.
Ni lo hará.
Tengo mis límites.
Puede ser cualquiera.
Tú, por ejemplo.
quien los borre
Dejando un rastro de sangre por el piso.
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