Me dice mamá: recibí tus cartas. Y yo lloro. Le digo que hoy y todos los días lloro, si la escucho, si persiste con sus llamadas después de trabajar. Me dice: son ciertas tus palabras, y escribes muy bonito. Yo repito “ah..muy bonito”. Y cómo ella me lo dice a lo mejor es verdad. Probablemente me lo creo. Porque luego continua: me has hecho llorar. Y yo no quiero su llanto. Yo quiero toda su risa en una botella de cristal, para abrirla después, como los ecos. Me llama mamá de nuevo, me pregunta “estás bien”,de nuevo estás bien, no te escucho bien, me estás mintiendo. No sé ni que decirle. Sumo las monedas para salir al otro día. Ella entonces me regala un “te presto”. A lo cual no le digo que no. Hay que estar en la lavandería, desear un trago de vodka o mata ratas. Algo. Desear todos los libros de poesía. Decirle: eso y mucho más. Mamá es una caja de música, mi caja de música predilecta. No acepta mis acetatos ni mi música clásica. Pero toca en mí, la membrana más triste, las letras y ojos más terriblemente tristes, de toda mi vida…
jueves, 4 de marzo de 2010
Me dice mamá: recibí tus cartas. Y yo lloro. Le digo que hoy y todos los días lloro, si la escucho, si persiste con sus llamadas después de trabajar. Me dice: son ciertas tus palabras, y escribes muy bonito. Yo repito “ah..muy bonito”. Y cómo ella me lo dice a lo mejor es verdad. Probablemente me lo creo. Porque luego continua: me has hecho llorar. Y yo no quiero su llanto. Yo quiero toda su risa en una botella de cristal, para abrirla después, como los ecos. Me llama mamá de nuevo, me pregunta “estás bien”,de nuevo estás bien, no te escucho bien, me estás mintiendo. No sé ni que decirle. Sumo las monedas para salir al otro día. Ella entonces me regala un “te presto”. A lo cual no le digo que no. Hay que estar en la lavandería, desear un trago de vodka o mata ratas. Algo. Desear todos los libros de poesía. Decirle: eso y mucho más. Mamá es una caja de música, mi caja de música predilecta. No acepta mis acetatos ni mi música clásica. Pero toca en mí, la membrana más triste, las letras y ojos más terriblemente tristes, de toda mi vida…
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