
Mañana, sólo mañana
amaneceré feliz, bien feliz
por amarte así, así, de tanto.
Me diré: pero que bella es
la mujer que amo, así, así,
de tanto. Y en nadie he podido
ni podré, recorrer así las venas
y sentir desde la sangre, un arrullo
infeliz y cuarteado. Un derrumbe.
Noches de piedra y sal. Fuego y
hambre. Pero, ¡que rica hambre
en forma de espiral afeminado!
Y lee bien, que solo mañana
tendré revuelta la hora donde
no te extraño. Comeré tu
boca, como haciendo fotos
de tu boca, quemando de
mi lengua oscuridades. Como
si estuvieras acá, cocinando
el desayuno y yo desdibujando
más hambre, siempre hambre.
De ti el eterno ayuno, una famélica
amaneceré feliz, bien feliz
por amarte así, así, de tanto.
Me diré: pero que bella es
la mujer que amo, así, así,
de tanto. Y en nadie he podido
ni podré, recorrer así las venas
y sentir desde la sangre, un arrullo
infeliz y cuarteado. Un derrumbe.
Noches de piedra y sal. Fuego y
hambre. Pero, ¡que rica hambre
en forma de espiral afeminado!
Y lee bien, que solo mañana
tendré revuelta la hora donde
no te extraño. Comeré tu
boca, como haciendo fotos
de tu boca, quemando de
mi lengua oscuridades. Como
si estuvieras acá, cocinando
el desayuno y yo desdibujando
más hambre, siempre hambre.
De ti el eterno ayuno, una famélica
anátomica.
Mañana querida,
olvidaré el sabor de tu ausencia.
El descuido que arde. Le llamaré
a las horas un disimulo distante,
y únicamente mañana, volveré
a imaginarme muy niña. Con un
overol azul y blusa blanca debajo.
Diciéndote: -tu nombre- , hoy la
pasan en la tele. Como si fuésemos
dos tipas regulares, normales,
en un domingo familiar. Olvidaré
que me ensartas tres dagas en el
pecho cuando dices: te odio tanto
como te amo. Y yo te amo, más y más.
Cuando crece profundo en mí,
un deseo incontrolable,
aniquilando la desgana de tragarse
el espacio donde se desarrollan tus
fauces traicioneras. Y correré
la voz a todas las que habitan
dentro mío, para que no necesiten
todo de ti y se conformen.
Cruelmente, estén felices con lo
que les toca. Tu abismo, tu belleza
terrenal, esos pechos como si
fueran el cielo de gigantes.
O el simple sonido de las manos
como esculpiendo arte sonoro y
con ruedas que viajan a través
de esta ciudad tan grande.
Mañana, mi amor, si existiese un
mañana así, perfecto. Ya no sería.
Sólo un paria errante esclavo de tus
celos y vergüenza. Sólo dos olas
cambiantes al vaivén de tu mar
inmenso. Si existiese mañana, ya
no sería yo. Amándote, así, así
de tanto. Correría martirizada
por algo que desconozco. Ahora.
olvidaré el sabor de tu ausencia.
El descuido que arde. Le llamaré
a las horas un disimulo distante,
y únicamente mañana, volveré
a imaginarme muy niña. Con un
overol azul y blusa blanca debajo.
Diciéndote: -tu nombre- , hoy la
pasan en la tele. Como si fuésemos
dos tipas regulares, normales,
en un domingo familiar. Olvidaré
que me ensartas tres dagas en el
pecho cuando dices: te odio tanto
como te amo. Y yo te amo, más y más.
Cuando crece profundo en mí,
un deseo incontrolable,
aniquilando la desgana de tragarse
el espacio donde se desarrollan tus
fauces traicioneras. Y correré
la voz a todas las que habitan
dentro mío, para que no necesiten
todo de ti y se conformen.
Cruelmente, estén felices con lo
que les toca. Tu abismo, tu belleza
terrenal, esos pechos como si
fueran el cielo de gigantes.
O el simple sonido de las manos
como esculpiendo arte sonoro y
con ruedas que viajan a través
de esta ciudad tan grande.
Mañana, mi amor, si existiese un
mañana así, perfecto. Ya no sería.
Sólo un paria errante esclavo de tus
celos y vergüenza. Sólo dos olas
cambiantes al vaivén de tu mar
inmenso. Si existiese mañana, ya
no sería yo. Amándote, así, así
de tanto. Correría martirizada
por algo que desconozco. Ahora.
Por eso ahora,
escucha,
recorre.
Que el dolor es la cera que te
forma y te consumes, te consumes
diario, como el sol que nace,
Que el dolor es la cera que te
forma y te consumes, te consumes
diario, como el sol que nace,
mata,
sonríe
y se desvanece
sin falta,
cada
puta
tarde.
sin falta,
cada
puta
tarde.
2 comentarios:
Me hiciste llorar maldita...
Te adoro
No necesito mañanas, si se ha creado algo como tú, para mi.
a quien putas le importa...
Yo te amo mi amor mìo
Publicar un comentario