
Fragmento de una carta escrita a Stephen Crown:
"[...] Lo cierto es que la primera mujer que me llevo más allá del gusto fuiste tú, algo que vale la pena, que vale la pena contar. Pero por alguna razón ambas preferimos todo esto, sin esas complicaciones, reproches, enredos. Quizá mi manera de amar en esa faceta te enfermaría hasta el asco, te cansaría los huesos o simplemente te destruiría como acostumbro hacer. Pueda ser que todo se fuera al carajo. Por eso y seguro muchas cosas más tenemos esto. Brindo por esto eternamente.
Me gustaron mujeres antes, creo desde niña, desde muy niña pero para mi es cierta fijación con la perfección. Y con esto no hablo de lo físico que al final no viene importando...sino ser una obra de arte, una mujer puede ser una obra de arte intrínseca. Una mujer como yo, puede amarlas a todas, todas son mujeres dicen. Ellos dicen: todas son hermosas bla bla bla. Simplemente no lo creo así, podría hacerle el amor a cada una probablemente, pero ninguna me gustaría lo suficiente. Incluso atreverme a decirles te amo, sentir que las amo y lo más seguro es que no sea verdad. Me miento siempre, le miento al mundo. Con ella no creo mentirme ahora ni nunca. Jessica Stein me llevó desde la risa al llanto. Me la imaginaba a ella ahí, toda histérica diciéndole a quien sea: ¿te doy asco? no, no, no puede ser, tengo que terminarlo. Me veía a mí siempre exigiéndole más de lo que puede darme o lo que puede permitirse dar. Tantas veces Crown, pedí tanto de ella sin saber o sin ser tan egoísta, me siento egoísta hoy. Siendo que yo la provoque, fui yo quien se aprovecho de su belleza, de ese amor puro e incontrolable que no veía venir, que no sabía descifrar y yo, con afán de alimentarme quise testar y apropiármelo. Te cuento que me dolió verla por que esta vez fue diferente, es todo tan "así". Sé bien que tienes en mente: todo lo que se hace por amor va más allá del bien o del mal. Lo sé, pero nunca seremos ella, ni pensaremos como ella. No tenemos su historia, ni su edad, no tenemos nada de ella. Comienzo a pensar que hasta hoy le amo de veras, completamente y profundamente. Y sé bien como terminará esto, aún así de vez en cuando me invento historias, diminutas historias en mi cabeza del principio, del clímax, del final de todo. Sé que terminara con un viaje eterno, una linda boda y una mujer llorando mil vidas, como si supiera que fue hecha para alguien pero ya no está ni lo estará. A veces me pienso así, que este dolor no ha comenzado siquiera, ni el amor, ni el deseo, ni la impotencia por poseer su boca aún cuando todo lo que hemos tenido ha sido libertad. Por que nunca fui tan libre y me esclavice tanto. Sí amada Crown, ver Jessica Stein me dolió por que me duele. Me retorcí en la cama de angustia, tuve que prender de nuevo la PC, pensar, idear que tenía ganas de escribirte. Como si escribirte fuese posar mi frente en tu ombligo, sentir que me sumerjo en aguas nunca hostiles. Aguas claras y de temperatura hermosa...Oh Crown hasta cuando seré esto que soy. Esto que ama así, que le ama así hasta desear la muerte. A ti y a mi no nos haría bien esto. Construiríamos un abismo ambulante para echar cuesta abajo todas nuestras penas, nuestros holocaustos sin fin ni principio. Me cubría el rostro Crown, gritaba eufonías desesperadamente tristes hacia dentro de mi cuerpo. En un futuro no voy a soportarlo, lloraré, lloraré, moriré un segundo y después despertaré para darme cuenta que sigo llorando algo que si bien no hará ruido toda la vida, seguirá arañando con silencio. Tendré que ser feliz Crown en la medida de lo posible. También reconozco que no será el fin del mundo pero por ahí escuche o leí, que el amor debe de dolerte, debe de dolerte mucho, mucho y debemos estar felices por ello por qué si duele es buena señal.
Hay tantas personas allá afuera que tengo que ver, probar, morder, oler y saborear. Yo lo sé amada Crown, yo lo sé. Pero tal cuando sin titubeo me dijiste que con Ana podrías pasar toda tu vida, ahora yo te digo, esto va doler, va doler siempre. Jessica Stein me abrió una pequeña herida ardiente y rosada, no sé por qué ya que es perfecta, seguro son esas palabras que revolotean las sienes diciendo: yo quiero que seas tú, yo quiero que sea ella. ¿Por qué este terrible momento Amada Crown? ¿No debimos? ¿Lo tiro todo a la basura? Ayúdame. Escríbeme. Te extraño. Prometo no hablar más de esto pero ven, dame consuelo. Los días van, no estoy muriendo a diario es un panorama sereno, sólo sucede que esa película hizo su brecha en mi herida y sus pasos, me duelen."
Me gustaron mujeres antes, creo desde niña, desde muy niña pero para mi es cierta fijación con la perfección. Y con esto no hablo de lo físico que al final no viene importando...sino ser una obra de arte, una mujer puede ser una obra de arte intrínseca. Una mujer como yo, puede amarlas a todas, todas son mujeres dicen. Ellos dicen: todas son hermosas bla bla bla. Simplemente no lo creo así, podría hacerle el amor a cada una probablemente, pero ninguna me gustaría lo suficiente. Incluso atreverme a decirles te amo, sentir que las amo y lo más seguro es que no sea verdad. Me miento siempre, le miento al mundo. Con ella no creo mentirme ahora ni nunca. Jessica Stein me llevó desde la risa al llanto. Me la imaginaba a ella ahí, toda histérica diciéndole a quien sea: ¿te doy asco? no, no, no puede ser, tengo que terminarlo. Me veía a mí siempre exigiéndole más de lo que puede darme o lo que puede permitirse dar. Tantas veces Crown, pedí tanto de ella sin saber o sin ser tan egoísta, me siento egoísta hoy. Siendo que yo la provoque, fui yo quien se aprovecho de su belleza, de ese amor puro e incontrolable que no veía venir, que no sabía descifrar y yo, con afán de alimentarme quise testar y apropiármelo. Te cuento que me dolió verla por que esta vez fue diferente, es todo tan "así". Sé bien que tienes en mente: todo lo que se hace por amor va más allá del bien o del mal. Lo sé, pero nunca seremos ella, ni pensaremos como ella. No tenemos su historia, ni su edad, no tenemos nada de ella. Comienzo a pensar que hasta hoy le amo de veras, completamente y profundamente. Y sé bien como terminará esto, aún así de vez en cuando me invento historias, diminutas historias en mi cabeza del principio, del clímax, del final de todo. Sé que terminara con un viaje eterno, una linda boda y una mujer llorando mil vidas, como si supiera que fue hecha para alguien pero ya no está ni lo estará. A veces me pienso así, que este dolor no ha comenzado siquiera, ni el amor, ni el deseo, ni la impotencia por poseer su boca aún cuando todo lo que hemos tenido ha sido libertad. Por que nunca fui tan libre y me esclavice tanto. Sí amada Crown, ver Jessica Stein me dolió por que me duele. Me retorcí en la cama de angustia, tuve que prender de nuevo la PC, pensar, idear que tenía ganas de escribirte. Como si escribirte fuese posar mi frente en tu ombligo, sentir que me sumerjo en aguas nunca hostiles. Aguas claras y de temperatura hermosa...Oh Crown hasta cuando seré esto que soy. Esto que ama así, que le ama así hasta desear la muerte. A ti y a mi no nos haría bien esto. Construiríamos un abismo ambulante para echar cuesta abajo todas nuestras penas, nuestros holocaustos sin fin ni principio. Me cubría el rostro Crown, gritaba eufonías desesperadamente tristes hacia dentro de mi cuerpo. En un futuro no voy a soportarlo, lloraré, lloraré, moriré un segundo y después despertaré para darme cuenta que sigo llorando algo que si bien no hará ruido toda la vida, seguirá arañando con silencio. Tendré que ser feliz Crown en la medida de lo posible. También reconozco que no será el fin del mundo pero por ahí escuche o leí, que el amor debe de dolerte, debe de dolerte mucho, mucho y debemos estar felices por ello por qué si duele es buena señal.
Hay tantas personas allá afuera que tengo que ver, probar, morder, oler y saborear. Yo lo sé amada Crown, yo lo sé. Pero tal cuando sin titubeo me dijiste que con Ana podrías pasar toda tu vida, ahora yo te digo, esto va doler, va doler siempre. Jessica Stein me abrió una pequeña herida ardiente y rosada, no sé por qué ya que es perfecta, seguro son esas palabras que revolotean las sienes diciendo: yo quiero que seas tú, yo quiero que sea ella. ¿Por qué este terrible momento Amada Crown? ¿No debimos? ¿Lo tiro todo a la basura? Ayúdame. Escríbeme. Te extraño. Prometo no hablar más de esto pero ven, dame consuelo. Los días van, no estoy muriendo a diario es un panorama sereno, sólo sucede que esa película hizo su brecha en mi herida y sus pasos, me duelen."
4 comentarios:
Uf...que dolor, por eso no ha pasado el cartero, no quiere ser responsable de las palabras escritas.Que te puedo sugerir?...que sigas escribiendo, eso hace bien para las visceralidades contenidas (ni para el corazón, ni para el alma) y por que te sale muy bien los escritos....Un abrazo, que el amor no siga doliendo.
Srita. Waltz, ni sus danzas, ni sus canciones densas, ni siquiera... sus otros poemas pueden destruir el dolor. Porque es uno solo y porque es supremo en toda su divinidad...Y usted es divinida, usted es dolor. Hay mujeres que vienen para herir, otras para ser heridas... usted es Herida, porque siempre... nos llega a doler. Besos.
Mira nomas! Diana Morales Jr. XD
Nada nada, vengo a decirte que te adoro y que adore esa carta. Tu sabes que aunque no pueda amo esa clase de detalles.
Soy la señorita redundancia!
Perdoname esa, horas y horas de matematicas me tienen harta!
Publicar un comentario